le daba solo en la mitad

El sol de la tarde

Este cuarto ¡que bien me lo conozco!
Ahora lo alquilan, junto con el de al lado,
para oficinas comerciales. Toda la casa
transformada en oficinas de intermediarios,
y de comerciantes, en Compañías.

¡Ay, este cuarto, qué familiar me es!

Aquí, junto a la puerta, estaba el sofá;
delante de él la alfombra turca;
cerca el estante con dos jarrones amarillos.
A la derecha, no, enfrente un armario de luna.
En el centro la mesa en que escribía,
y tres sillas de paja, grandes.
Y junto a la ventana aquella cama
en la que nos amamos tantas veces.

En algún sitio estarán aún los pobres.

Y junto a la ventana aquella cama;
el sol de la tarde le daba solo en la mitad.

… Una tarde, a las cuatro, nos habíamos separado
por una semana solamente… ¡Ay!,
la semana aquella ha sido para siempre.

C. Kavafis.
Traducción de Ramón Irigoyen.

víctimas y vasos de güisqui

Tan inverosímil como dura, muy dura. Tragedia ética impecable, que para eso está detrás quien está.
Si yo tuviera el placer de conocer a Lucy -estudió para abogada pero no ejerció...-, me iría gustosamente esta tarde, sobre las cinco, a lo del vaso:

It would be understandable if you felt, at this particular juncture in your own and our collective national life, unable to welcome any further uncertainty. But, if you have passed through the looking glass – often with the help of a whisky glass – as I have, and your fractured psyche is now leaning into a life where nothing is as it seems and we walk on shifting sands scattered on the backs of turtles while political event horizons make the very air quake around us, welcome to BBC One’s new drama The Victim.

El resto está aquí.