Iván el terrible



La noche del cazador, un presa que elegir,
avería y redención para ponerlo todo en la canción,
contarlo todo sin decir cómo paso,
es imposible no entenderlo.

Algo de autodestrucción y una pizca de placer,
kilos de insatisfacción y una oreja más que conquistar,
alguna mueca, una sonrisa de pavor,
hemos llegado hasta la puerta.

Una etapa con dos puertos de montaña,
el corredor de fondo sabe superar
el contratiempo, es juez y parte,
el propio tiempo es arte y hasta nos podría ayudar.

Es imposible no entederlo,
lucha en el barro como en una peli,
Rocco Siffredi es siempre otro.

Me contaron una vez
que hoy el lujo en Nueva York
ya no es lo que era ayer, 
hoy cualquiera podría tener 
alguna marca (mueca) que distinga donde está,
por eso ya nunca sabemos quién es quién cuando es discreto.
Un aplauso americano,
poco a poco va empezando el rock que siempre es lo mejor.

El corredor de fondo sabe
"el tiempo es sólo una ilusión y algunas veces la jugó".
Con más burbujas que un anuncio de champagne
hemos llegado hasta la puerta.

Es imposible no entenderlo ahora ...
ahora ...
ahora, ahora ..