antonimias en rojo y azul

I was alone thinking I was just fine
I wasn't looking for anyone to be mine
I thought love was just a fabrication
A train that wouldn't stop at my station
Home, alone, that was my consignment
Solitary confinement
So when we met I was skirting around you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you, honey
I didn't know I was looking for love
Until I found you, baby, oh no
Didn't know I was looking for love
Didn't know I was looking for love
'Cause there you stood and I would
Oh I wonder could I say how I felt
And not be misunderstood
A thousand stars came into my system
I never knew how much I had missed them
Slap on the map of my heart you landed
I was coy but you made me candid
And now the planets circle around you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you, baby
I didn't know I was looking for love
Until I found you, baby
Didn't know I was looking for love
Didn't know I was looking for love
So we built from here with love the foundation
In a world of tears, one consolation
Now you're here, there's a full brass band
Playing in me like a wonderland
And if you left I would be two-foot small
And every tear would be a waterfall
Soundless, boundless, I surround you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I just didn't know
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
(I just didn't know)
Until I found you
I didn't know I was looking for love
(I just didn't know)
Didn't know I was looking for love
Until I found you, baby
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you, baby
Didn't know I was looking for love
Didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
Didn't know I was looking for love
Didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you
I didn't know I was looking for love
Until I found you

They're writing songs of love, but not for me.
A lucky star's above, but not for me.
With love to lead the way
I've found more clouds of grey
than any Russain play could guarantee.
I was a fool to fall and get that way;
Heigh-ho! Alas! And also, lack-a-day!
Although I can't dismiss the mem'ry of her kiss,
I guess she's not for me.
She's knocking on a door, but not for me.
She'll plan a two by four, but not for me.
I know that love's a game;
I'm puzzled, just the same,
was I the moth or flame?
I'm all at sea.
It all began so well, but what an end!
This is the time a feller needs a friend,
when ev'ry happy plot ends with the marriage knot,
and there's no knot for me.




la frontera

Habían desaparecido los alambres de espino, el poste fronterizo estaba podrido e inclinado como una tumba vieja, lo habían cubierto jóvenes matorrales. Qué aspecto tan diferente tenía antes esta frontera.
Entre las temblorosas cimas de los abetos había una torre inmóvil de centinela. Siguiendo el trazado de un viejo sendero, llegué al claro. El viento mecía la abundante hierba y hacía golpear la puerta de la torre, que se abría y cerraba inútilmente como unas fauces desdentadas; mi bota chocó contra una oxidada lata de conserva oculta en la hierba. Rodó con desgana, emitiendo un breve y hueco sonido, y después se detuvo.
Arriba, en la plataforma de la torre, no había nadie. «¡Alto! ¿Quien va? » - sonó una voz.
Era mi propia voz, era yo mismo quien me gritaba. No podía soportar más ese silencio, esos escasos ruidos y susurros, y ese golpear de la puerta. Y es que estaba cruzando la frontera.
¿Qué contesto? Antes era fácil. Bastaba con facilitar nombre y apellido, sexo, fecha y lugar de nacimiento, dirección, talla, color de ojos, moreno, rubio o castaño, profesión y número de pasaporte. ¿Y ahora que soy yo quien se pregunta a sí mismo?

Al no encontrar respuesta, me lancé a la huida, retrocedí a través del bosque, esperando en cualquier momento el disparo mortal. Pero me acordé de que no iba armado y aflojé el paso.

Slawomir Mrozek. Desconozco quién hace la traducción.

la pluma

El siguiente artículo apareció en El País el 20/12/1980. Iba sin firma.

Se ha presentado en el Ateneo de Madrid la edición facsimilar de la primera época (1921­ 1923) de la revista La Pluma, y la nueva edición de la segunda época, que ha comenzado a publicarse en 1980. En el acto intervinieron Julio Caro Baroja, Francisco Giral, Julio Vélez y Manuel Martínez Azaña. Jorge Guillén envió un escrito, que fue leído, sobre la reencarnación de la mencionada revista en un ambiente cultural que ha cambiado. Manuel Martínez Azaña, nieto de Manuel Azaña y miembro destacado del consejo de dirección de la nueva La Pluma, ha explicado a EL PAIS el sentido de esta publicación, a la vez que la evocado la figura, «de alguna manera todavía vigente», del que fuera presidente de la República.«En el centenario de Azaña, mi ilusión era reeditar La Pluma, porque yo desde siempre he considerado que esta revista era una de las más importantes de entonces, pero no tenía medios. Tuve la suerte de que, a través de Enrique Montero, la editorial alemana Topos Verlag, que ya ha editado dieciocho colecciones enteras de otras tantas revistas españolas de la II República, se interesara por La Pluma. En esta revista se encerraba un gran interés por la cultura, recogido en las firmas de los intelectuales más famosos de aquel tiempo, que querían romper con el conformismo y también con un cierto manierismo». En el ámbito cultural, La Pluma se distingue también, según Manuel Martínez Azaña, por haber descubierto escritores como Valle­Inclán, o por haber introducido nombres como Jorge Guillén (presidente de La Pluma en la segunda época) o como García Lorca. «En el momento que apareció La Pluma no existía ninguna otra revista de este tipo, por lo que inmediatamente se convirtió en un refugio para la vocación. literaria en plenitud de independencia. Sólo dos revistas de tipo vanguardista, Grecia y Ultra, existían entonces. Al desaparecer La Pluma, en parte porque Azaña se pasó a dirigir la revista España, apareció Revista de Occidente y, más tarde, La Gaceta Literaria. Manuel Martínez Azaña cree que La Pluma es una revista irrepetible. «No se quiera ver en esta segunda época la pretensión de la primera. No renegamos de nuestras raíces, pero no podemos hacer lo mismo». «Azaña tuvo una doble vertiente. Fue intelectual y político, pero en esta época se está recuperando al personaje literario y se está olvidando al político, como si diera miedo hablar de su condición de republicano. Pero a Azaña no se le puede reivindicar por uno solo de sus costados, sino que debe hacérsele de cuerpo entero, con sus errores y sus aciertos y virtudes. Este movimiento de recuperación ha sido también unilateral con otros autores. Por ejemplo, de Machado, Lorca, Miguel Hernández se ha recuperado en España, sobre todo en la España del franquismo, lo que se ha querido recuperar». Para el descendiente de Azaña, la vocación principal del antiguo presidente de la República era eminentemente política antes que literaria. «Cuando Azaña estaba en La Pluma ya hacía política.

Yo he tenido la fortuna de que llegue a mis manos un ejemplar de la segunda época, el nº 6 en concreto. Dejo algo de lo que Cortázar propone, asunto peliagudo que enlaza con lo que no es Tintín y la Castafiore. A Julio le quedaba nada para que se le fuera su amada Carol, y otro más nada para irse él.







Por cierto, en el prólogo aparece una palabra que desconocía:

hieródulo, la.

(Del gr. ἱερόδουλος, esclavo sagrado).

1. m. y f. En la antigua Grecia, esclavo dedicado al servicio de una divinidad.

Cuesta comprender y asumir qué nos ha pasado en el tránsito de principios de los ochenta a nuestros días.
A veces me siento Gurb.