Este
que sigue es un mensaje que estos días pasados envié a varias personas
allegadas. Reflexiones en tierras tinerfeñas:
Creo que del oficio de
poeta la sociedad obtiene uno de los mayores beneficios que pueda obtener de
todos los oficios que en ella haya. También creo que quien sufra de ese oficio
no opcional ni volitivo padece uno de los mayores contratiempos que un integrante
de dicha sociedad pueda tener. Y poeta, por supuesto, no sólo es quien escribe
poesía.
Cesare
Pavese, que sabía que a los poetas la anhedonia no suele serles dada, dijo en su momento:
Todo poeta se ha
angustiado, se ha asombrado y ha gozado.